El aseo corporal es una necesidad básica. Para el cuidado de la piel sana, la principal actividad es su limpieza e hidratación y la higiene ha de realizarse diariamente. El estar aseado nos proporciona ventajas físicas, psíquicas e incluso sociales, y si se trata de una persona encamada, además tendremos que añadir estos beneficios:
·Activar su circulación.
·Mantener la piel cuidada.
·Y lo más importante, prevenir las úlceras por decúbito, ya que llevar a cabo la higiene diaria en cama, nos ayuda a reducir el riesgo de padecer las úlceras por presión, y nos permite poder apreciar el estado de la piel de la persona encamada.